
Después de su primera toma de contacto con la modalidad, Julio Martínez vuelve a saltar el charco como ya hizo en su etapa del karting. En aquella ocasión logró algunos resultados sorprendentes a nivel nacional, destacando sus dos condecoraciones por la deportividad mostrada en la pista.
A pesar de que su inicial contacto con los rallyes no acabó como hubieran deseado, la participación en el ‘Villa de Santa Brígida’ supuso para Julio Martínez una experiencia importante. Conocer nuevos recorridos, acostumbrarse a escuchar al copiloto y, sobre todo, la rutina de estar toda una jornada al volante de un vehículo de competición, son algunos de los campos en los que deberá seguir ampliando su bagaje personal.
Este fin de semana, ya en Cantabria, se dibuja un nuevo reto en el horizonte. Tramos exigentes con un ‘grip’ que en la mayoría de ocasiones obliga a los pilotos a lucir sus mejores dotes. En este sentido la toma de contacto con el asfalto del norte peninsular es ideal, ya que la pareja Martínez-Sosa afrontará un total de ocho pruebas especiales, distribuidas de la siguiente manera: ‘Ontón-Otañes’ (5,15 km a las 10:58 h y 12:53 h), ‘Samano-Guriezo’ (10,20 km a las 11:21h y 13:16 h), ‘Liendo-Limpias’ (8,00 km a las 16:30 h y 18:25 h) y ‘Ampuero-Guriezo’ (12,10 km a las 17:00 h y 18:55 h). En total realizarán 70,9 kilómetros cronometrados.